Aquí puede cada uno contar las historias para no dormir que tenemos almacenadas. Yo voy a empezar por dos de ellas. La primera fue una vez que nos comimos el Mijaelo y yo un tripi en el local. Claro como ahí no es que hubiera mucho espacio para hacer loopings en ese estado pues había que quemar energías de alguna manera.
Pues los dos decidimos quemar fuerzas poniendo todo lo que hubiera en el local, es decir, muebles discos aparatos, etcétera, etcétera en el mismo rincón. ¿Os acordáis de dónde estaba la nevera? Joer! Pues ahí cabía absolutamente todo. No recuerdo quién vió nuestra obra, pero más de dos horas de risillas pasamos haciendo esa torre.
viernes, 3 de abril de 2009
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1 comentario:
hostias, chiiaval!
no macordaba!
JAJAJAAAAA
que bueno! es un misterio quién lo limpio y lo reordenó y se lo calló como una puta...
mmmhhh, pa mi que fué el Tito, que era proclive a ese tipo de hazañas, él se movía en esos ámibitos. Llamémosle "la gloria de lo anónimo"
mu bueno, deivid!
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